Anima
XL Recordings
27/Jun/2019
"Vacío lleno"
Una de las muestras más irrefutables de que Radiohead es una banda compuesta por genios en la materia, son los trabajos paralelos a la banda que tienen casi todos sus integrantes; Philip Selway explorando un sonido Pop semi-Folk sofisticado y sutil; Jonny Greenwood componiendo sus propios trabajos orquestales y bandas sonoras de películas aclamadas por todos, y obviamente, Thom Yorke explotando la cara más calculada y robótica del Pop IDM con Atoms for Peace, así como también los rincones más íntimos y minimalistas del "Glitch Pop" bajo su propio nombre. Y es que, recordando, tanto The Eraser como AMOK e incluso Tomorrow's Modern Boxes han dividido a los fanáticos de la música más de lo que cualquier otro trabajo de Radiohead o sus miembros en singular lo han hecho, debido a sus aproximaciones arriesgadas y poco ortodoxas con aires familiares de lo más insospechado que en su momento ha hecho Radiohead teniendo como inevitables comparaciones Kid A, In Rainbows o The King of Limbs.
Yorke hace su aparición solista en un álbum grande y estelar, luego de tres años del viaje melancólico y orgánico que resultó A Moon Shaped Pool. También, un año después de haber hecho el soundtrack para el remake de Suspiria, aunado al par de soundtracks que Greenwood hizo para You Were Never Really Here y Phantom Thread; por ello es un hecho que ANIMA como tercer álbum en solitario de Yorke ha venido a nosotros de manera inesperada pero justo en el momento adecuado dadas las circunstancias y contexto temporal, puesto que también se aprovecha el empujón que tuvo Radiohead en tendencias al filtrarse las sesiones de grabación para OK Computer este mismo año.
Y es que ANIMA puesto a comparación con The Eraser o Kid A, deja a deber bastante, por no decir que las canciones de ANIMA que ya habían sido estrenadas en vivo, rara vez eran del interés del público, por lo que este trabajo vive ante las expectativas y el hype gracias a su estética rítmica y el sampling constante a la voz de Thom, quien redujo la complejidad electrónica que distingue su catálogo personal para entregar una escucha más digerible, amigable y fácil de identificar. "I Am a Very Rude Person" depende enteramente de esta "simplificación" para no perderse en nuestras memorias. Pero como un ente en solitario, independiente de comparaciones e incluso del corto que Paul Thomas Anderson dirigió para Netflix, ANIMA demuestra ser el trabajo más ambicioso y definido que el frontman de Radiohead ha firmado con su nombre hasta la fecha.
La yuxtaposición entre kick drums arrítimicos, cuerdas orquestales, sintetizadores hipnóticos, notas de teclado fundidas y las vocales diluidas vuelven a "Runwayaway" uno de los mejores cierres que cualquier álbum del 2019 podría tener, mientras que marca la realización de un concepto que poco a poco se viene desarrollando a lo largo del álbum. Porque ANIMA es un trabajo fluido que permite al escucha sumergirse fácilmente en su juego de synths durante "Dawn Chorus" o "Last I Heard...", de modo que mantiene un sentido de progresión constante y enlaza sus canciones para darnos una experiencia cinemática digna de escucharse hasta el último minuto.
Muy por el contrario de lo que se pudiera creer, este disco carece de texturas variadas. Después de la segunda o tercera escucha, se tiene una idea bastante clara de las limitaciones que tiene su paleta de sonidos. La producción de su eterno colaborador, Nigel Godrich, nos da el puente más cercano a la música de Radiohead mediante un aprovechamiento similar de los canales de audio y el wall of sound que se fortalece a partir de la segunda mitad recordando bastante al A Moon Shaped Pool; reitero, el reproducir de más este trabajo puede ser contraproducente para los fanáticos más atentos de oído, así que la producción, podríamos tomarla como un arma de doble filo.
Para equilibrar la balanza a favor de ANIMA entra el factor "ambient" de su panorámica: el hecho de que sea un álbum basado en grandes texturas también invita a su escucha más "casual" o "de fondo", donde "The Axe" sale como gran ganadora. La sensación de densidad que acompaña al paisaje en general podría dar la falsa impresión de complejidad absoluta o ser música para cierto tipo de personas, la realidad es que ANIMA se comporta como el disco más accesible y gratificante de Thom Yorke. Acompañado de un concepto que reza sobre la ansiedad y la importancia del alma en tiempos distópicos, este disco tiene distintos enfoques para escucharse, quizás no tantos como sus mejores obras, pero si los suficientes para apreciar o reversionar el significado y progresión de "Twist".
Ahora bien, este álbum es muy bueno visto como la suma de todos sus componentes, pero deconstruyéndolo por partes pierde puntos por no ser precisamente la obra maestra que grandes medios intentan vendernos: de hecho pareciera ser paralelo líricamente con Safe in the Hands of Love de Yves Tumor; el haber simplificado su música hace que quede un espacio en blanco más evidente sobre el cual pudo haberse trabajado en detalles o adornos para no dar esa apariencia monocromática acorde a la portada. La presencia de puntos climáticos se cuentan con los dedos de una mano, pero brillan con suficiente intensidad para mantener la atención en un disco que sabe mantenerse interesante utilizando progresión pura, es un movimiento brillante que explica la efectividad detrás de "Impossible Knots" y "Not the News".
Por lo tanto, nos quedamos con el mejor álbum de Thom Yorke, no tanto por romper nuevas barreras sonoras y llevarnos al éxtasis sonoro y conceptual, sino por demostrar que ésto no es realmente necesario siempre y cuando se tenga idea de a dónde se quiere llegar, con qué métodos y bajo las influencias correctas. Digamos que es el Kid A de Thom Yorke, pero entendiendo que cuando Kid A maravilló al mundo era el año 2000.
80%
01. Traffic
02. Last I Heard (…He Was Circling The Drain)
03. Twist
04. Dawn Chorus
05. I Am A Very Rude Person
07. The Axe
08. Impossible Knots
09. Runwayaway
Por: Sebastián López Seguir a @sebas_0132
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